jueves, 9 de octubre de 2008

Praga según Daniel

Nunca viene mal otro punto de vista, y si bien es cierto que a mi me gusta narrar los viajes desde las experiencias personales (lo más enriquecedor de un viaje para mi gusto), admito que también hay que dar una visión más general. Por eso mi compañero de viaje y amigo Daniel se ha ofrecido a compartir con vosotros su estancia en la capital checa:

"A los viajeros, a los verdaderos amantes de la exploración de lo desconocido, les recomiendo vivamente evitar llegar de noche a esta fantástica ciudad. La droga y la prostitución están a la orden del día. Es difícil caminar más de 100 metros sin que un extraño te ofrezca entrar a un cabaret, o todo tipo de droga.

Sin embargo, con la luz del día, Praga recobra todo el encanto que se le supone. Esta ciudad es un verdadero poema de piedra. Ya sea caminando por su tranquilo río, o disfrutando de sus ostentosas catedrales, reina un ambiente de armonía donde todo parece hecho para el placer de los ojos.

Es una ciudad fría, y como bien decía un buen hombre cuyos consejos desoímos(lo que nos trajo algún que otro problema), cuanto más fría, más encantadora es esta ciudad. Es una ciudad de tejados, ciudad cuyas catedrales datan algunas de los siglos XIII y XIV, y otras construcciones como su conocido castillo, que data de mediados del siglo XVIII. Es por esto que tiene un toque medieval que la hace bastante atractiva. Pudimos disfrutar de las magníficas vistas que ofrece la ciudad desde el castillo, o desde lo alto de la torre del reloj astronómico.

Como dato curioso, resaltar que en Praga se habla checo. Hasta ahí todo puede parecer normal, pero es que la noticia hay que tomarla al pie de la letra. Sólo se habla checo. Es muy difícil hacerse entender en cualquier otro idioma, lo cual también nos deparó algún problema con una maleta que nos dejamos en un andén de la estación de Brno.

Algo que supongo desconocerá la mayoría de personas que no hayan tenido el placer de visitar esta ciudad, es la ya aferrada tradición de las marionetas, que aunque no son originarias de la república checa, sino de Francia(más concretamente de Lyon) tienen ya en Praga, un hueco social y cultural( hay un teatro exclusivamente dedicado a la representación de obras, entre ellas la ópera prima de Giovanni, mediante marionetas).

En cuanto a la gastronomía, no parece que los checos sigan una dieta rica en pescado precisamente. Allí el pescado brillaba por su ausencia. Para los que hemos trabajado alguna vez en hostelería, hemos tenido la máxima de "el cliente siempre tiene la razón". Pues bien, allí no parecen tenerlo muy claro, ya que la atención al cliente es una mezcla entre ruda y despreocupada.

Y para el que quiera saber más, le animo sinceramente a que visite esta capital, antes de muchas otras quizá con más renombre, pero seguramente con menos encanto. En cuanto al precio, tanto el alojamiento(17 euros nos costó cada noche) como la bebida(menos de un euro la pinta de cerveza) o la comida( 12 euros por persona fue nuestra factura más cara en una taberna típica checa, en la disfrutamos de una copiosa comida) son más que asequibles, por lo que no supondrá un gran agujero para vuestro bolsillo.

Me despido atentamente: Danielo"

4 comentarios:

  1. ¿Cómo se hace para caminar por el río?

    Por tocar un poco las narices más que nada... :)

    Y me alegra saber que aunque sea un destino turístico muy demandado no se suban a la parra con los precios. Otro punto a su favor para ir allí este puente foral.

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  2. increible post... pero una cosa ¿Que tal estaban las putas?

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  3. Eso preguntale a Ibai, que intimó más....

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  4. Venga, coméntanos como fue la cosa en Viena que estamos ansiosos...

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